¿Alguna vez ha querido vivir en el mar, saltando de un puerto a otro y teniendo a su disposición una gama completa de servicios? ¿Llegar a ver los lugares más exóticos y aislados de la tierra y todo esto mientras disfrutando de la comodidad de un mega-yate de lujo? Lo mismo quizo Knut Kloster Jr. – miembro de una prominente familia naviera noruega y padre de la moderna industria de cruceros – que tuvo la idea de construir una «aldea global en el mar».
Así es como MS The World aparecio, un barco de 196 metros (644 pies) y el más grande yate residencial de propiedad privada en el mundo, con 165 apartamentos de lujo que se venden por hasta 11.3 millones de dólares. La construcción comenzó en Rissa, Noruega, en el año 2000 y el barco zarpó de Oslo, en marzo de 2002, haciendo su viaje inaugural desde Lisboa en el mismo año. Fue comprado por sus residentes en octubre de 2003. Alrededor del 49 por ciento de ellos son de América del Norte. Algunos de los residentes viven ahí a tiempo completo, mientras que otros vienen periódicamente a bordo a lo largo del año.
The World es en un crucero continuo que visita todos los continentes. Se queda de 2 a 5 días en la mayoría de los puertos, cambiando de puertos y destinos después de las consultas entre los pasajeros y el capitán. En 2012 se convirtió en el buque de pasajeros más grande que transitó el Pasaje Noroeste, con 481 pasajeros y tripulación, siguiendo el camino de Roald Amundsen, el primero en completar el viaje en 1906. El barco hace paradas con regularidad en Antártida y las islas remotas del Océano Atlántico. En 2017 navegará a través del Pacífico y visitará la región de Polynesia.
El barco es ambientalmente amistoso, siendo el primero de su tamaño a quemar diesel marino, no combustible de caldera. The World es también el primer barco que cuenta con un sistema de depuración de aguas residuales único donde los residuos son filtrados por un sistema de flotación. Las 12 cubiertas ofrecen la única pista de tenis de tamaño completo en el mar, un spa, piscinas, un sumiller, seis restaurantes, varios bares, un salón de té, un simulador de golf, biblioteca y cine. También hay un supermercado y una una charcutería. Los residentes son atendidos por alrededor de 200 miembros de la tripulación.
Si todo lo anterior suena atractivo, usted debe saber que un pequeño número de apartamentos van para la reventa cada año. Para conseguir uno, tendrá que demostrar que su activo neto supera 5 millones de dólares. Despues añada 10 a 15 por ciento del precio de compra para el mantenimiento anual y otros honorarios basados en el tamaño del apartamento. Las 165 residencias a bordo, van desde estudios a unidades de tres dormitorios, que pueden acomodar hasta 12 pasajeros. Todas las residencias cuentan con un tipo de terraza, permitiendo amplias vistas del mar y de los muchos destinos a lo largo del camino. El entretenimiento en general, está relacionado con la atmósfera íntima de la nave, incluyendo cómicos, jazz clásico y artistas pop.
En declaraciones para The Wall Street Journal, una pareja de Las Vegas, Robert y Janet Sabes, han contado que fueron propietarios de una unidad de dos habitaciones y dos baños durante casi seis años. Ellos pagaron 2.8 millones de dólares para la unidad y consiguieron aproximadamente la misma cantidad cuando la vendieron. Normalmente ellos pasaban seis meses al año en el barco, y sus tasas anuales llegaron a unos 300.000 dólares. «Aunque fue muy divertido», dijo Robert Sabes, «sólo hay tantos lugares donde un barco de crucero puede ir. Una vez que has estado allí, comienzas a repetir».
Hasta el momento, The World – que muestra la bandera de las Bahamas – realizó tres expediciones especiales a lugares remotos, como la costa oriental de Groenlandia, Namibia y los territorios británicos de ultramar St. Helena y Ascension (que se encuentran en el medio del Atlántico), la Antártida, Georgia del Sur y las Islas Malvinas. La nave ha visitado más de 900 puertos en más de 140 países mientras navegando en un itinerario continuo por todo el mundo a una velocidad máxima de 18,5 nudos. A lo largo del camino, hay experiencias culturales inmersivas, conferencias y todo tipo de clases incluyendo baile, cocina, idiomas, artes y artesanías, computadoras, música y fotografía.
El viaje de 2016 inició en la Antártida, subió la costa de América del Sur, cruzó el Atlántico para explorar Europa Occidental y el Mediterráneo antes de pasar por el Canal Suez y los destinos en el Oriente Medio, India, Maldivas y Malasia, terminando en Australia Occidental para celebrar el Año Nuevo en Sydney.
El viaje continúa en el año 2017 hasta a Antártida y Nueva Zelanda, después Vanuatu y las Islas Salomón. En la primavera, la nave alcanzará Asia Oriental, Hawai y el oeste de los Estados Unidos y Canadá y Alaska en el verano, y luego abriéndo camino hacia México y América Central. En noviembre, la nave va a llegar a Cuba, luego al sur-este de los Estados Unidos y una celebración de fin de año en Miami.
Actualmente hay una nave residencial aún más grande bajo construcción en Corea del Sur por Samsung Heavy Industries, uno de los constructores de buques más grandes del mundo. Se llama Utopía y se espera ser finalizada este año a un costo reportado de 1,1 mil millones de dólares. Será más del doble del tamaño de The World con una longitud de 296 metros (971 pies) y tendrá 199 residencias, un hotel de 175 habitaciones, spa y un club nocturno. Las residencias variarán en precio desde 3.9 millones a 30 millones de dólares.
